Roma es una de las capitales del mundo más visitadas, y es que la gran variedad de opciones de ocio y culturales que nos ofrece, hacen que sea una ciudad perfecta para disfrutar de unas vacaciones. Además de ser una de las poblaciones con un patrimonio más rico y variado del continente europeo, está preparada para acoger todo tipo de turismo. Precisamente las personas que viajan en silla de ruedas y necesitan visitar una ciudad que esté adaptada en la mayoría de puntos de interés, encontrarán en Roma un destino perfecto para hacer una escapada.
Además de que los monumentos más destacados están bien preparados para personas con movilidad reducida, cuentan con varios aspectos que facilitarán la visita de estos turistas por la capital italiana. Diferentes medios de transporte adaptados para discapacitados, museos y construcciones libres de barreras arquitectónicas así como aseos para minusválidos disponibles en los principales puntos de interés. En la mayoría de lugares públicos, se puede acceder de forma gratuita y sin esperas tanto la persona que viaja en silla de ruedas como un acompañante. A continuación, te dejamos más información sobre los lugares accesibles de Roma, así como los sitios que te recomendamos evitar si tienes dificultades de movilidad.
Principales puntos de interés
Coliseo y Foro. Las largas filas para entrar a uno de los monumentos más visitados de Roma, el Coliseo, siempre están presentes a cualquier hora del día. Si viajamos en silla de ruedas, tanto nosotros como un acompañante, podremos entrar sin tener que hacer la larga espera para ello y además sin ningún tipo de coste. Se accede mediante una rampa y en su interior podremos visitarlo mediante un recorrido circular libre de barreras arquitectónicas. Cuenta con un aseo en la planta inferior así como un ascensor panorámico al que sólo pueden acceder personas con algún tipo de minusvalía.
Al tratarse de una construcción con más de 2 mil años de antigüedad, el pavimento no está perfecto pero puede recorrerse en silla de ruedas con la ayuda de un acompañante. El Foro sin embargo, tiene algunos tramos que no permiten el acceso en silla de ruedas, por lo que si hacemos la visita conjunta, tenemos que tener en cuenta que en este último puede que no lo veamos completamente a diferencia del Coliseo Romano.
El Vaticano. Uno de los lugares de Roma más turísticos es El Vaticano, un micro-estado situado en pleno corazón de la capital italiana. Los principales atractivos que podemos encontrar aquí son totalmente accesibles para personas que van en silla de ruedas, aunque hay que exceptuar algunos puntos que vamos a detallar a continuación. La Plaza de San Pedro es una de las plazas más grandes y famosas del mundo, además de contar con un cuidado pavimento perfecto para el tránsito con una silla de ruedas.
Roma en silla de ruedas
El protagonista de la plaza es la imponente basílica de San Pedro, que permite el acceso a los turistas con movilidad reducida mediante una rampa accesible en la parte derecha de la entrada. En su interior se pueden encontrar aseos adaptados, así como un ascensor para discapacitados que te permite acceder hasta la parte alta de la basílica. Sin embargo, no se puede llegar hasta la zona superior de la cúpula ya que para ello hay que subir unas empinadas escaleras en las que no es posible sortear con ascensor. En El Vaticano tampoco se puede acceder a la necrópolis ni a los jardines si viajamos en silla de ruedas.
Museos Vaticanos. Y tras conocer la plaza y basílica de San Pedro, toca conocer otro de los atractivos principales, los Museos Vaticanos. Se trata de uno de los espacios culturales que más turistas acoge en Italia y por lo tanto, una visita casi obligatoria para cualquier viajero. Y es que los Museos Vaticanos son totalmente accesibles para los turistas que van en silla de ruedas, y aunque éste no la lleve, puede solicitarla de forma gratuita una vez que se llega al centro. Tanto la persona con minusvalía como el acompañante, puede entrar sin hacer fila y de forma gratuita, ahorrándose los 16 euros que cuesta la entrada. Además de contar con aseos adaptados y ascensores para recorrer las diferentes zonas, hay un acceso exclusivo para las personas en silla de ruedas que quieren conocer la Capilla Sixtina.
Panteón. El mejor monumento que se conserva de la Antigua Roma es el conocido Panteón de Agripa. La entrada es gratuita para cualquier visitante, tenga una minusvalía o no. Para sortear las escaleras que dan la bienvenida a los visitantes, se puede subir mediante un acceso adaptado. Además, su interior está libre de barreras arquitectónicas que permitirán a los visitantes recorrer toda la construcción.
Ventajas e inconvenientes de viajar en silla de ruedas
La mayoría de puntos de interés que están al aire libre se encuentra muy próximos el uno del otro, en pleno corazón de Roma. La Fontana de Trevi, la Plaza de España o la Plaza Navona están preparadas con bordillos rebajados y un pavimento accesible para los turistas que viajan en silla de ruedas. También hay que recalcar que la capital italiana es una de las capitales mejor adaptadas para este tipo de visitantes, ya que los lugares públicos principales tienen aseos adaptados y permiten el acceso a minusválidos sin ningún tipo de coste y sin hacer filas. Más del 70% de los autobuses también están preparados para que suban personas en sillas de ruedas y faciliten el recorrido por la ciudad.
Y como aspectos negativos hay que destacar que el pavimento en muchas calles del centro de Roma no está perfectamente asfaltado y en ocasiones no se puede recorrer en silla de ruedas. Muchos bordillos de las aceras están rebajados, pero en ocasiones el de la parte de enfrente no lo está, por lo que hace que el tránsito no sea óptimo en todos los tramos de la ciudad. Otras actividades como realizar un paseo en barca por el río Tíber o visitar el Museo del Palatino no son accesibles para personas con movilidad reducida.
Fuente: Apartamentos Roma