Para personas con discapacidad física, mayores o embarazadas. Cáceres presume de su reciente elección como destino turístico accesible -un título promovido por la empresa Thyssen Krupp- y ayer estrenó un nuevo servicio dirigido a visitantes con movilidad reducida. Se trata del préstamo gratuito de dos sillas de ruedas eléctricas, tipo ‘scooter’, para recorrer la Ciudad Monumental. Estos vehículos adaptados están ya disponibles en la oficina de turismo situada en la Plaza de Santa Clara.
Los usuarios no tendrán que pagar nada por utilizarlos, aunque sí deberán depositar 20 euros en concepto de fianza al retirarlos, un dinero que recuperarán cuando los devuelvan. Dispondrán, como máximo, de dos horas para visitar los puntos más accesibles del casco viejo.
La alcaldesa, Elena Nevado, presentó ayer estos dos vehículos en la Plaza Mayor, acompañada por integrantes del Consejo Sectorial de la Discapacidad. Este modelo de moto accesible alcanza una velocidad de 6,4 kilómetros por hora, tiene un motor eléctrico con autonomía de hasta 32 kilómetros y dispone de suspensión delantera.
El Ayuntamiento brinda este servicio gracias a un convenio firmado con la obra social de Caja Extremadura. «Estas dos motocicletas van a servir para recorrer nuestra Ciudad Monumental a aquellas personas que tengan alguna diversidad funcional, que estén impedidas bien de forma permanente o de forma parcial. Se trata de que puedan hacer uso de este recurso para disfrutar de nuestro patrimonio histórico», detalló Nevado. Y apostilló: «Si el servicio funciona y tiene demanda, lo ampliaremos de cara al futuro». El importe de los dos vehículos presentados ayer alcanza los 3.500 euros, según el dato facilitado por Carlos Ongallo, director de la obra social de Caja Extremadura.
Las barreras
Santiago Iniesta Vivas, de 57 años, tiene su propia ‘scooter’ de cuatro ruedas para desplazarse por Cáceres. Pero cuando va de turismo a otras ciudades, cuenta, echa en falta un servicio como el que se acaba de poner en marcha en la parte antigua. «Si, por ejemplo, voy a visitar Ávila no me puedo llevar mi ‘scooter’ porque es demasiado grande y no tengo forma de trasladarla. Entonces, solo me llevo las muletas. Con muletas, mi visita estaría muy limitada. Lo bueno sería que al visitar la oficina de turismo me ofrecieran una moto como esta. Entonces sí podría ver toda la parte antigua», explica este placentino afincado en Cáceres. «Este servicio va a ser divino para la gente que tenga discapacidad. Es un paso adelante muy importante», agrega.
Ayer, a mediodía, Juan Antonio Martín y María Teresa Martínez contemplaban la Plaza de San Mateo. Ella iba montada en un vehículo casi idéntico al que acaba de estrenar el Ayuntamiento. Es la mejor opción, admite este matrimonio de Madrid, para hacer turismo. María Teresa tiene una atrofia espinal degenerativa. «Con muletas es casi imposible ver toda la zona antigua, en silla de ruedas sería muy trabajoso para la persona que empuja pero hacerlo en una silla con motor o en un car como éste sí se puede. Ahora bien, lo primero que hay que hacer es dirigirse a la oficina de turismo y preguntar qué se puede visitar con este aparato», detallan.
Así lo hicieron al llegar a la oficina de la Plaza Mayor, donde les marcaron el itinerario más accesible para recorrer la parte antigua: Plaza de Santa María, adarves, Puerta de Mérida, calle Ancha, San Mateo y Plaza de las Veletas.
Fuente: Hoy
