Después de más de tres años de trabajo, el museo tiflológico abrió sus puertas en abril de 2011 en la ciudad. Plasencia se convertía así en la única localidad extremeña en contar con un museo para ciegos. Hoy sigue siendo la única y su creador, el escultor Juan Gila, ha propuesto al Ayuntamiento ampliarlo con más piezas.
El centro cultural de Las Claras es el espacio que alberga el museo tiflológico. En él están montadas las 16 piezas que dan contenido al museo, una iniciativa de la exconcejala de Turismo, Raquel Puertas, de cuya elaboración y coordinación se ocupó Gila. En él colaboraron nueve alumnos de su taller de la Escuela de Bellas Artes ‘Rodrigo Alemán’, perteneciente a la Institución Cultural El Brocense de la Diputación Provincial de Cáceres.
La casa verata de Los Pinos, los Arcos de San Antón, el Abuelo Mayorga, la fachada del Ayuntamiento, la portada de la Catedral vieja, el Ángel de la Justicia, la Virgen del Puerto, la iglesia de San Nicolás, un cofrade, dos gárgolas, la fachada de Santo Domingo… Son algunas de las piezas que dan contenido al primer museo para ciegos de la región y que han sido elaboradas en arcilla, resina y piedra.
Son las piezas esculpidas que posibilitan a las personas invidentes, a través del tacto, acercarse al patrimonio placentino y a los videntes constatar el buen hacer del equipo coordinado por Juan Gila.
«Creo que ha sido una iniciativa estupenda y que, por ello, sería positivo para la ciudad que se ampliara», señala Juan Gila. Su idea es que cada curso los alumnos del taller de escultura que él imparte en ‘Rodrigo Alemán’ puedan elaborar nuevas piezas. «Porque aún hay muchos elementos del patrimonio placentino por realizarse, como es el caso del arco de la Salud, la Puerta del Sol, la ermita del Puerto, otras iglesias, etcétera». Gila confía en que el Ayuntamiento acepte su propuesta.
Fuente: Hoy