La capacitación, los talleres y cursos son el camino a seguir para que los establecimientos comunes se conviertan en incluyentes para las personas con discapacidad.
Para lograrlo, se pueden tomar cursos que imparte el Gobierno a través de la Secretaría de Turismo de Jalisco, o bien contactar a empresas dedicadas a ello, como Arqcesible.
En esta última, el director Carlos Ramírez explicó que ser incluyente es cuestión de voluntad, ya que los costos para lograrlo no representan un gasto alto.
“Les damos cursos de sensibilización para que sepan qué es discapacidad, después les ofrecemos modificar la estructura, porque de nada sirve estar súper capacitado si no hay accesibilidad”, comentó.
Otra opción consiste en obtener el Distintivo C, que otorga la Secretaría de Turismo de Jalisco (Secturjal), que certifica que el lugar es 100 por ciento incluyente con personas con discapacidad motriz, auditiva y visual.
Para adquirir este certificado se debe tomar un curso que incluye un taller de lenguaje de señas. En total, la capacitación dura entre tres y seis meses. Al final, el personal del establecimiento puede ser intérprete de sordomudos.
También se puede adquirir el Distintivo I, que es el que tienen hoteles como El Celta y el Presidente Intercontinental, mismos que cuentan con medidas para personas con discapacidad motriz.
De hecho, el Distintivo I también se puede tramitar en la Ciudad de México y en Estados Unidos, y lo pueden adquirir empresas, hoteles, instituciones educativas, organismos públicos y restaurantes.
Fuente: am
