Jesús Sánchez ingeniero industrial, que como tesis de final de carrera, cuando estudiaba en la Escuela Técnica Superior de Ingenierías Industrial y Aeronáutica de Terrassa (ETSEIAT) de la Universitat Politécnica de Catalunya (UPC) diseñó una innovadora escalera mecánica accesible para todo tipo de usuarios El nuevo diseño fue premiado por el Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña y por la Fundación Universia, y supone un ahorro de energía, material de construcción y costes de instalación.
La idea
Surgió el pasado 2007 con el accidente de una amiga suya que, al intentar acceder al vagon del metro metió sin querer el pie el el gap (la distancia que hay etre el vagón y el andén) justo cuando se ponía en marcha el vagón. Por suerte no le pasó nada, pero este incidente hizo pensar a Jesús: Si una persona de a pie podía tropezar en condiciones normales, ¿Que le podía suceder a alguien en silla de ruedas? Fue entonces cuando empezó a idear una posible solución al respecto, como son las actuales rampas que nos encontramos al principio de los andenes del metro, pero estos planteamientos le llevaron a preguntarse que antes de subir al vagón estas personas con movilidad reducida tendrían que poder llegar hasta el andén, ¿no? Así fue como nació la idea que le llevó posteriormente, a diseñar la escalera mecánica adecuada a personas con movilidad reducida
El objetivo
Era que pudieran salvar un desnivel con una escalera mecánica para cubrir las pendientes intermedias que no pueden ser salvadas por un ascensor ni por una rampa mecánica.
La escalera está diseñada para poder ser usada en cualquier lugar donde se quiera salvar cómodamente un desnivel: en grandes almacenes, superficies comerciales e incluso al aire libre, en un parque o en la ciudad. Los principales beneficiarios serían las personas en sillas de ruedas, pudiéndose añadir a este colectivo personas con movilidad reducida que lleven un cochecito de bebé, el carro de la compra o cualquier objeto o carga que le dificulte la subida o bajada en escaleras mecánicas.
El diseño
Es similar al actual, pero con innovaciones muy destacadas. Cuando un usuario con movilidad reducida que se desplaza en silla de ruedas necesite utilizar la escalera, podrá hacer que, tras presionar un botón, tres de los escalones se muevan verticalmente y se conviertan en una plataforma plana a la que podrá acceder con su silla de ruedas. Esta plataforma dispone de una pestaña que hará de barrera de seguridad para que la silla de ruedas no pueda caerse hacia atrás, y de una serie de detectores que asegure una perfecta colocación de la misma antes de que la escalera se mueva de nuevo.
Después de que el usuario se haya acomodado con seguridad en la plataforma la escalera se pondrá en funcionamiento hasta llegar al final del trayecto. Cuando abandone la instalación, la plataforma se volverá a convertir en tres escalones independientes para seguir funcionando y ofreciendo el servicio de cualquier escalera convencional.
Jesús Sánchez también pensó en un sistema con mando a distancia para las personas discapacitadas que, por limitaciones físicas, no pueden apretar el botón de activación de la plataforma. Incorpora también otros sistemas que hacen posible que la utilicen personas con discapacidades visuales y auditivas, mediante señales acústicas y luminosas, parecidas al sistema que llevan incorporados los bastones de las personas invidentes, para poder cruzar un semáforo.
La seguridad
Es un elemento importante para Jesús Sánchez, ya que la escalera lleva incorporada un sistema de baterías autónomas que suministrarían energía en caso de que se produzca un corte de suministro y de esta manera, si la escalera estuviera dando el servicio a una persona con movilidad reducida, ésta pudiera llegar hasta el final del trayecto.
Ahorro energético y de costes
En este sentido, el autor del proyecto calcula que, respecto a las escaleras actuales, se obtiene alrededor de un 30% de ahorro energético, de costes de instalación y de material.
La cinta de escalones que se desplaza entre el nivel más alto y el más bajo, salvando la pendiente, es la misma tanto para subir como para bajar. Es decir, funciona siguiendo un circuito cerrado que se parece a las cintas transportadoras de equipajes de los aeropuertos pero en pendiente
En las escaleras actuales se usa una instalación para subir y otra para bajar, lo que conlleva la necesidad de instalar dos sistemas de tracción cuando con su diseño se necesita uno solo.
Según el creador del innovador diseño, “la principal dificultad técnica que he tenido que abordar ha sido encontrar la manera de hacer girar los escalones al final de las pendientes, pero finalmente lo he conseguido”.
En muchos casos hay zonas de difícil acceso en las que es imposible, bien por la geografía del terreno ó bien por otros motivos, instalar un ascensor, como por ejemplo sucede en la zona del carmel de Barcelona (en la que la instalación de las escaleras mecánicas supuso un gran avance en la calidad de vida de sus habitantes) pero viendo la foto que adjuntamos podemos comprobar que es imposible para una persona en silla de ruedas poder acceder a su vivienda y es entonces cuando este tipo de escalera solucionaría este problema.
“A menudo los ayuntamientos y las empresas piensan en ascensores para dar accesibilidad a las personas con movilidad reducida, pero mi sistema es, en muchos casos, más económico y sostenible que instalar un ascensor. Se trata de un diseño que soluciona la accesibilidad en zonas con pendientes, en las que la solución actual son las escaleras fijas (ver fotos) y donde a menudo es muy costoso, o prácticamente imposible, instalar un ascensor”, afirma Jesús Sánchez.
Diseño patentado y a la búsqueda de inversores
De momento, el autor ya obtuvo el premio al proyecto de fin de carrera más creativo de la ETSEIAT, otorgado por el Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña y el accésit al premio de la Fundación Universia. El diseño ya está patentado y varios fabricantes, operadores de transporte público y ayuntamientos se han interesado por esta solución. Ahora solo falta encontrar inversores que financien la construcción de esta innovadora escalera mecánica. “Hay que conseguir engranar las necesidades con sus soluciones” afirma Jesús Sánchez y nosotros añadimos que gracias al invento de Jesús, nuestro sector se podría ver reforzado de cara a la exportación.
Fuente: Ascensores y Elevadores