Andalucía quiere contar con el sello de ‘Destino Accesible’ que le certifica que dispone de una oferta adaptada a las necesidades de 36 millones de potenciales turistas en Europa con algún tipo de discapacidad. El consejero de Turismo y Comercio, Rafael Rodríguez, avanzó ayer en el Parlamento andaluz que van a impulsar un programa específico para obtener esta calificación en el marco del Plan de Calidad Turística 2014-2016, que está en fase de elaboración junto con los agentes del sector.
Rodríguez explicó que el reto es universalizar el derecho a viajar y consideró que el objetivo es atraer a un mercado de 2,5 millones de personas en España y de 36 millones en el conjunto de Europa.
«El turismo accesible no es sólo un segmento más para completar la oferta, sino un acto de justicia social en favor de la igualdad de oportunidades de cualquier ciudadano, con independencia de discapacidades físicas o psíquicas. Se trata de eliminar barreras para poner al alcance de todas las personas el derecho al descanso y a viajar», precisó.
Las primeras acciones ya se han determinado. El consejero explicó ayer que van a elaborar un estudio para conocer la situación actual de la oferta andaluza en este segmento. Además, establecerán un programa de asistencia gratuita a empresas y servicios para implantar la norma UNE 17000 de accesibilidad.
La puesta es firme y se contempla incluso poner en marcha una orden de subvenciones para fomentar la adaptación y la eliminación de barreras en establecimientos, equipamientos e infraestructuras.
Programa firme
El consejero recordó: «la accesiblidad es una obligación que viene recogida en la Ley del Turismo autonómico y que ya se han puesto en marcha diversas iniciativas que han permitido avanzar en esta materia», pero señaló que para facilitar la consecución de este objetivo también se ha previsto sellar alianzas con entidades representativas de colectivos de personas con discapacidad para el desarrollo de un decálogo sobre criterios y buenas prácticas, la creación de un distintivo en la materia, la celebración de jornadas informativas y de sensibilización, y la adaptación de la normativa turística. Es más, destacó: «la apuesta es firme. La accesibilidad en el turismo permite mejorar la imagen de los destinos, los cuales incrementan su disfrute emocional al convertirse en lugares referentes de la igualdad de derechos y condiciones de todas las personas, y ayuda a la creación de una oferta turística sostenible, ya que aumenta el público objetivo, y permite romper con la estacionalidad».
Precisamente ayer, el director de Accesibilidad Universal de Fundación ONCE, Jesús Hernández, señaló que la accesibilidad en el turismo «es una cuestión de calidad y sostenibilidad, además de seguridad». Durante su participación en el VI Foro para la Sostenibilidad Medioambiental del Turismo en España, explicó que se debe trabajar de forma transversal a la sostenibilidad. En su opinión, el turismo no sólo requiere que seamos respetuosos con el medio ambiente, la economía o la cultura local, sino que «también debemos pensar en las personas».
Fuente: SUR.es