Reino Unido y Alemania, los dos mayores mercados emisores de turistas de Europa, tienen una población con movilidad reducida y otras discapacidades físicas que en total gasta cerca de 5.000 millones de euros cada año en viajes, según datos sobre turismo accesible recopilados por la feria ITB de Berlín y la consultora IPK.

“La importancia económica de este mercado es enorme: sólo los ciudadanos de Estados Unidos con discapacidades o movilidad reducida gastan cerca de 10.000 millones de euros en viajes cada año”, según añaden las citadas fuentes.

En Alemania, la facturación en viajes de este segmento de la población se estima en 2.500 millones de euros, cifra muy similar a la del Reino Unido.

“En el futuro estas cifras de ventas podrán aumentar”, dice Lilian Müller, presidenta de la asociaciónEuropean Network for Accessible Tourism (ENAT).

Sin embargo, según ha detectado la feria ITB Berlín, en Alemania el 37% de las personas con movilidad reducida han decidido no viajar debido a la falta de servicios e instalaciones accesibles.

Una tendencia en aumento

Según explica la ITB, “a pesar de tener tiempo y dinero, millones de personas en todo el mundo con discapacidades o movilidad reducida renuncian a viajar” porque las empresas y/o los destinos no les ofrecen un viaje, estancia o experiencia confortable, libre de estrés o problemas.

Además, advierte la ITB, con el paso de los años este segmento de la población irá aumentando debido a los cambios demográficos, que llevan a un envejecimiento de la sociedad en numerosos países desarrollados. Así que la demanda potencial de viajes también aumentará.

Por ejemplo, las estadísticas más recientes revelan que sólo en Europa hay cerca de 80 millones de personas con algún grado de discapacidad o movilidad reducida.

Martin Buck, director del Competence Center Travel & Logistics de Messe Berlin, institución que organiza la ITB, explica: “Es muy importante que la industria turística aproveche este potencial. La eliminación de barreras garantiza unas vacaciones sin problemas a las personas con discapacidades, pero también a las familias con niños pequeños, a víctimas de tráfico o a personas mayores”.

De hecho, según remarca la presidenta de ENAT, el turismo accesible no debería ser considerado como un nicho de mercado. “La accesibilidad debe ser parte de cada paquete turístico”.

Además, indica Lilian Müller, también hay una demanda para operadores especializados en servicios para clientes con grandes necesidades de movilidad.

La accesibilidad tampoco se limita a cuartos de baños, rampas, etc. Internet es otra gran asignatura pendiente. Según una encuesta realizada por ENAT, sólo 10 de 39 webs de grandes empresas turísticas europeas analizadas en 2011 eran accesibles para personas ciegas o sordas.

Source: hosteltur

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